Como todos los lunes les traigo un nuevo tema para comenzar bien la semana, en esta ocasión le toca el turno a Britney Spears con el tema “Piece of Me”.
Que tengan un buen inicio de semana.






visto en Haha.

Un inmenso oso pardo se metió en un restaurante rumano acompañado de sus dos oseznos. Después de derribar unas cuantas mesas tomó asiento como un cliente más. Su conducta antisocial sembró el terror de la concurrencia.Y aquí quieren hacer obligatoria la propina...
Como la atención requerida nunca llegó, los tres animales se dirigieron a la cocina y se sirvieron por su propia cuenta. "Fue como estar en 'Rizitos de Oro y los tres osos' pero al revés", explicó un comensal. "Y además esta vez querían todo el menú, no sólo la avena".
Una vez satisfechos, los tres animales se retiraron del local. Minutos después de la partida se hicieron presentes la policía y autoridades de vida silvestre.
Resta decir que ante la falta de servicio a la mesa los osos no dejaron propina.










Nuevamente el destino me envía a una noticia interesante, y es que esta la encontré de casualidad, aunque tal vez fue la magia del libro la que la tajo hasta mi, anda a saber...
A mi no me ha ocurrido, pero he visto como muchos, cuando el cansancio les gana, apoyan el codo en la mesa y luego la mejilla en el puño para descansar un momento, para luego dejarlo porque no es muy cómodo, para aquellos, y especialmente aquellas que les guste darse una siestesita han creado el artefacto ideal, Pilo Pilo es un anillo que en lugar de una costosa joya trae un pequeño cojin en el cual apoyar la mejilla a la hora de darte un descanso ya sea en el trabajo, a la espera en un restaurante o camino a casa en el bus (siempre que puedas...)
Esta imagen me ha dejado con la boca abierta, es sorprendente, nadie en forma ficticia a logrado hacer algo como esto en una computadora o fotografía o efectos especiales para televisión o películas, realmente sorprendente.




Una compañía ferroviaria japonesa que ha enfrentado pérdidas económicas encontró la solución perfecta para atraer multitudes y hacer repuntar el negocio: una gata.Tama, una gatita atigrada de nueve años, sólo tiene que posarse en la entrada de la estación Kishi, al oeste de Japón, vestida con un sombrerito negro y posar para los miles de turistas que viajan de partes remotas del país para verla.
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