Hace 30 años, el 19 de septiembre un profesor de la universidad de CarnegieMellon de Estados Unidos quiso interpretar con cierta fidelidad la expresión y tono de voz de lo que estaba escribiendo y nació la secuencia :-)
El profesor Scott Fahlman, para resolver el problema de los malos entendidos pensó que este tipo de mensajes simulando una expresión corporal eran simples de entender y serían soportados sin mayores problemas por el código ASCII que dominaban tanto tableros como paneles electrónicos por esos tiempos.
Y Nacieron los Emoticones...
En poco tiempo, estos emoticones comenzaron a gozar de un gran prestigio debido a la facilidad de uso y eficacia en su mensaje, en palabras más simples, ¿quién no entiende una carita sonriente, una triste o una enojada?
A pesar de que durante los años siguientes se incorporaron a millones de servicios, incluídos el chat y el correo electrónico, tanto en modo texto plano como gráfico, las expresiones siguen manteniendo las mismas convenciones del año de su invención, escritas en el mismo sentido que el texto normal y de recostadas hacia la izquierda.